Los “ESPACIOS” de Lino Cataldi aluden, una vez más, a la naturaleza animada e
inanimada.
Lejos de las sensaciones de una naturaleza muerta, dichos “ESPACIOS” están en un
desarrollo continuo y dinámico que nos sugiere inestables superposiciones de paisajes
terrestres, marinos y aéreos.
El tema principal es una energía encolerizada, no sólo física sino también psíquica, que
desborda hacia el exterior desde un punto simbólico determinado.
Focalizándose en medio de vapores, sombras y llamas, la energía se revela a si misma
en formas embrionarias; por ejemplo en “La Creación”, temerario “eco” de la “Creazione di
Adamo” de MIGUEL ANGEL. Pero en otros, como en “El Angel”, el torbellino parece
absorver formas vivas dentro de si misma, más que producirlas.
Frecuentemente las pinturas de Lino Cataldi nos dan la impresión de un “silencio” entre
las sensaciones de creación y decadencia.
La belleza de la composición es evidente en el distinto uso del color: Fuertes contrastes
en las obras más “caracteriales” y un delicado control de la cromaticidad en aquellas, sólo
aparentemente, más serenas. |